Hay perros que están bien en una protectora. Cualquier perro estaría mejor en un hogar, eso sin duda, y una protectora siempre debería ser algo temporal, un destino de paso para cualquier animal hasta que encuentra a su familia, pero los hay que en las protectoras están felices. Pese a la escasez de mimos, a no tener un humano de referencia, a que no haya sofás y largos paseos, esos cheniles en los que ya no hay palos y sí suficiente comida, colegas con los que relacionarse y algo de cariño de tanto en cuanto parecen una maravilla comparado con lo que conocieron.
No es el caso de muchos otros animales. Hay perros que se apagan por mucho que tengan sus necesidades básicas cubiertas. Hay perros que entran en depresiones fulgurantes que hacen peligrar su vida y otros que van perdiendo el brillo, las ganas, paulatinamente.
El día de su rescate.
Perros que necesitan un hogar. Perros como Deneb, que debe su nombre a la estrella más brillante del verano.
“Deneb se nos apaga, cada día que pasa es más duro para él. Lleva demasiado tiempo. Se nos parte el alma al cerrarle la puerta cada vez que nos vamos, es muy feliz las pocas horas que pasa acompañado, pero al irnos su mirada de tristeza nos derrumba”, me cuentan desde El amigo fiel de Córdoba.
“Pasan los meses y los años y seguimos sin nada para él, nadie se interesa, ni acogida ni mucho menos adopción. Pedimos una vez más una acogida o adopción, necesita salir ya. Si alguien quiere ayudarlo, por favor que nos escriba”.
¿Y cómo es Deneb? “Un perro espectacular, cariñoso, simpático, bueno y muy sociable”. Un perro de esos que no se entiende que no encuentren un hogar. Por desgracia como él hay muchos en perreras y protectoras.
Deneb se entrega en adopción con seguimiento, contrato, pasaporte europeo, microchip, vacunas, analíticas, desparasitaciones, esterilizado y con revisión veterinaria. Se puede trasladar a cualquier punto de España.
Contacto: informacion@elamigofielcordoba.org
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